Despiertas gracias a un café, del que quieres transmitir su olor, su espumosa textura y su amargo sabor...
Saboreas cada plato con el que olvidas las dietas, disfrutando simplemente de lo que nos alimenta...
Respiras naturaleza y haces deporte como parte de tu espíritu, de tu esencia...
Sonríes, en cada foto, más incluso que cuando te tengo delante...
Buscas mostrar tu lado oculto en el espejo, haciéndonos plantear cuál es el verdadero...
Y provocas descubriéndote lo suficiente para que seamos nosotros quienes completemos el puzzle de lo que no vemos e imaginemos lo que hay debajo de cada juego de disfraces...
Si te montas en avión, me enseñas el ala planeando entre las nubes, con los pies pisando un falso suelo, el alma respirando cielo...
Si viajas en tren, dejas vacías las demás vías, planteándonos si cogiste el correcto, si llegaste a tiempo...
Si te dejas llevar en coche, grabas cada paisaje a cámara lenta, mientras crees correr tan rápido como el viento que ondea tu pelo...
Si tu transporte es el bus o el metro, siempre nos trasladas a las vidas de otros, a los asientos vacíos, a la gente en sus constantes rutinas...
Fantaseas con una pelea de bolas nevadas y muñecos de nieve, robándole las narices de zanahoria a las ensaladas y te sientes, cada vez, como si nunca hubieras visto nevar antes...
Te conviertes en estatua bajo unas gafas de sol, calentándote con los primeros rayos de sol después de un tiritado invierno...dejándolos entrar también por tu ventana...
Si la primavera llega, tu sangre altera, las flores florecen y vuelves a abrazar a los árboles de cada uno de los parques en los que te quedarías a vivir para siempre...
Sin embargo, cuando el sol aprieta, tus pies en la arena quieren sacar la envidia de todo aquel que mirando hacia abajo se ve enterrado hasta las rodillas en asfalto...
Cuando tus pasos te han llevado a la orilla recordándote el frío en pleno verano, o el calor en pleno invierno, nos metes en la cabeza ese sonido de las olas rompiendo en tu cuerpo, bañándote de sal, desconectando del resto del mundo...
Y nos invitas a tus vacaciones, a tus viajes a otros mundos, en los que descubrir nuevas sensaciones...
Si la noche depara éxtasis en la marea, por muy lejos que esté el mar, contemplas la luna llena y sientes que puedes estar en cualquier otro lugar, observando la misma luz...
Compartes esa canción que te hace levantarte de la silla, o cerrar los ojos, o cantar sin remedio, o bailar a lo loco, o llorar despacio, o reír al llegar al estribillo...
Adornas cada "click" con pensamientos desordenados, caóticos, reflexivos, divertidos, espontáneos...
Nos presentas a personas (y a animales) con la suerte de estar a tu lado, o tú a la suya, y os retáis a caretos o al postureo,
mostrando esa complicidad más allá de una imagen...
Y después de tu día a día, y de cada uno de los instantes que has querido contar, creo conocerte un poco mejor, o quizás me doy cuenta que todos actuamos más o menos igual...fotografiando nuestra vida, de forma que destacamos sólo aquello que queremos enmarcar para siempre...momentos especiales retratados como únicos para cada uno de nosotros...
Digital Witness - St. Vincent
https://www.youtube.com/watch?v=mVAxUMuhz98
No hay comentarios:
Publicar un comentario