lunes, 27 de abril de 2020


El mundo ha parado, ha empezado a respirar...y nosotros, a través de la ventana, observamos como todo cambia sin parar, a veces quedándonos sin aire, otras, dejándonos llevar por el "todo saldrá bien"...mi casa se ha convertido en mi fuerte, en la trinchera desde la que aguantar, desde la que recapacitar y descubrir las miles de formas en la que seríamos capaces de vencer, transformándonos en los héroes que siempre quisimos admirar...sin embargo, las ideas se han confinado en mi cabeza en medio de un caos donde todos podemos ser víctimas y verdugos de una misma lucha...las contradicciones palpitan a cada instante, y a veces, ya no sé ni qué pensar, ni qué decir...no hay despedidas ni bienvenidas, ni abrazos en los que arroparse cuando necesitemos reconfortarnos, nunca dio tanto miedo la soledad...las cifras y las distancias aumentan, y siento que los aplausos no suenan al mismo ritmo...parece que lo único importante es gritar más, hacernos expertos de todo (y de nada), mientras seguimos perdiendo...mas que volver a la normalidad, deberíamos estar dispuestos a crear una realidad diferente, un nuevo futuro, en el que realmente hayamos aprendido a convivir, sin dar todo por sentado...sin creernos que uno solo es más importante que toda la humanidad, que La Tierra, que la naturaleza...ésa que ahora sigilosa nos enseña que sabe cuidarse mejor que todos nosotros...ojalá estemos a tiempo, ojalá no sea tarde para comenzar, para salir sin temor, poco a poco, de este entuerto...y que esta distopía en la que se ha convertido nuestra vida, la miremos un día de lejos, preguntándonos si realmente fue una pesadilla, de la que por fin pudimos despertar...





Aves Enjauladas - Rozalén
https://www.youtube.com/watch?v=B9rfD5WEJXM