viernes, 17 de julio de 2020

Ha llegado el momento, demasiado tiempo mirando el cielo, desdibujando las nubes, coloreando cada atardecer, como si fuera irreal...es la hora de ponerse el traje, de alcanzar la exosfera, deshojando cada capa de la atmósfera, como una cebolla a la que sacarle el corazón...vistiendo una segunda piel, la escafandra que me permita un contacto indirecto con la absoluta oscuridad...hasta que mi cabeza, convertida en un casco panorámico, pueda descubrir la luz de la estrella a la que seguir...en un viaje a través de agujeros de gusano, rompiendo las reglas del espacio-tiempo, flotando a millones de kilómetros de aquí...y entonces, cuando te encuentre, me transformaré en un cometa espacial...pide un deseo...estoy a punto de pasar por tu planeta...creerás que solo soy un asteroide, hasta que me veas brillar y chocar contra tu firmamento...ya no será inalcanzable, ya no habrá marcha atrás...llegaré a ti, estés dónde estés...me sacudiré el polvo estelar, y crearemos una nueva vida en la que creer...un instante que tuvo que esperar hasta hacerse esp(a/e)cial...seré la astronauta que no tenga miedo de inventar su propio mundo...junto a ti...





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